Liderazgo y carisma
Si queremos definir la palabra “liderazgo” tenemos que usar la palabra “influencia”. Entonces: Si liderazgo es el arte de influenciar a otros, debe haber una manera de hacerlo sin que la gente piense que les estás influenciando. ¿O a caso lo saben ya? El liderazgo es más que influencia, es: comunicación efectiva, liderar a través del ejemplo que dan tus actos, liderar a otros como una linterna en la noche.
La expresión influenciar a otros parece ser un comportamiento poco ético, pero la cuestión es: ¿Vamos a influenciar a otros para hacer algo bueno? Un líder sabe lo que debe hacer y cómo actuar en cada momento, porque tiene claro en su mente las visiones, misiones y valores de la organización en la que trabaja y es capaz de convertirlo en las visiones, misiones y valores de sus colaboradores.
Pero todo esto es muy teórico. ¿Cómo se lleva todo esto en la práctica?
Inspirar a otros a través de acciones muy concretas y creer en eso, es el primer paso para convertirte en un líder efectivo. Cuando creemos en algo y trabajamos duramente para conseguir esos objetivos, somos capaces de ser más efectivos, más carismáticos y más positivos.
La positividad nos conduce al éxito y el éxito no llega así porque sí: el 80% es estrategia y 20% es acción.
Estáte atento a tus acciones, tus estrategias y tus visiones. Elige los pasos correctos de acuerdo aquellas acciones, estrategias y visiones que te habías planteado en un primer momento y toma conciencia de los obstáculos que te puedas encontrar en el camino. Comunícate de manera transparente, busca comunicación continua con otros, se objetivo y respetuoso en tus conversaciones diarias.
Ser carismático es una cuestión de comunicación, y por otra parte inspirar a otros depende de tu carisma, actitud y positividad.
Ser un líder efectivo es el resultado de una influencia positiva.