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Periodismo, paro y nuevos medios

Muchas cosas están cambiando en la prensa y en los medios de comunicación tradicionales.

El fin de la dependencia publicitaria con las instituciones públicas, la rebaja del coste por anuncio o el descenso del número de lectores, que han dejado de confiar a la prensa tradicional y ahora prefieren informarse a través de medios digitales, son algunos de los factores que están convulsionando el status-quo mediático.

Lejos de abordar la necesidad de cambios desde el valor de la plantilla con la que se cuenta, palabras como ERE, despidos o reducción salarial se han instalado en las redacciones de todo el estado desde hace años.

Después de la construcción, una de los sectores que, proporcionalmente, más duramente ha sufrido el desempleo en estos años de recesión económica y vulnerabilidad de los derechos laborales han sido los periodistas y personas trabajadoras en los medios de comunicación.

Según datos del ‘Informe de la Profesión Periodística 2013’, entre 2008 y octubre de 2013, se han despedido a 11.151 personas vinculadas al periodismo en el estado español. El paro en la profesión aumentó un escandaloso 132% entre estos años. En 2013 había 10.560 periodistas inscritos en el paro. Las mujeres representan el 63% de estos periodistas parados, frente al 37% de los hombres. Andalucía, Cataluña y Madrid son las regiones con mayor índice de desempleo periodístico con el 56 % del total del paro en el sector.

La avalancha de cierre de cabeceras, que comenzó incluso antes, en 2007, se ha traducido en la desaparición de 284 medios. De ellos, 73 cerraron sus puertas en el año 2013.

No obstante, la precariedad y las barreras para reincorporarse al mercado laboral, así como una reflexión crítica sobre el rumbo que cogió la profesión en los últimos años, han animado a numerosos profesionales  a iniciar nuevos proyectos informativos. La Asociación de la Prensa de Madrid contabiliza 297 nuevos medios de comunicación y otros proyectos informativos orientados a información nacional, internacional, local e hiperlocal, deportiva, cultural… Aunque señalan que es imposible contar con un registro completo.

Algunos de estos nuevos proyectos periodísticos son posibles gracias a una financiación mediante crowdfunding, socios o subscriptores. Este modelo implica un cambio en la relación lector/medio de comunicación. La confianza y el valor del contenido son los motores de esta nueva sinergia que se abre como esperanza para el futuro de la prensa. No obstante, queda mucho camino por recorrer y los nuevos proyectos no lo tienen fácil para encontrar su audiencia fiel y comprometida económicamente que garantice estabilidad, sueldos dignos y la capacidad para dedicar tiempo a la investigación e información de calidad.

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